El puerto de Orne es un pequeño puerto aislado situado en la península Antártica, rodeado de imponentes glaciares y montañas nevadas. Es un lugar popular entre los amantes de la vida salvaje, ya que alberga varias especies de pingüinos y focas. La impresionante belleza natural de este puerto le dejará boquiabierto

El puerto de Orne fue descubierto por la expedición antártica belga de Gerlache en 1898 y está formado por un litoral rocoso bajo laderas de pedregal y manchas de nieve permanente. En esta zona son comunes los pingüinos barbijo y papúa, así como las focas de Weddell.